El grupo industrial y tecnológico alemán Siemens ha logrado el mejor resultado de su historia, casi 5.500 millones de euros, y quiere sacar a bolsa su negocio de tecnología sanitaria.
Siemens prevé viento en contra para el crecimiento y las inversiones en sus mercados por el complejo entorno geopolítico.
El grupo redujo en su año fiscal 2015/2016, que finalizó en septiembre, el beneficio neto atribuible 25,2%, hasta 5.450 millones de euros, por la ausencia de extraordinarios por desinversiones del año pasado.
El año pasado había vendido su participación en el fabricante de electrodomésticos BSH a Bosch y su división de audífonos.
Quiere sacar a bolsa su división de tecnología sanitaria, Siemens Healthineers, mediante un procedimiento de listing, pero prevé mantener una participación mayoritaria.
Las acciones de Siemens subían hoy en la bolsa de Fráncfort 4%, hasta 108,75 euros, tras dar a conocer estos resultados y la salida a bolsa.
En algunos momentos de la negociación la acción de Siemens llegó a su valor máximo, desde hace muchos años, en 109,65 euros.
Siemens quiere incrementar el pago de dividendos y propondrá en la próxima junta general de accionistas el reparto de 3,60 euros por acción, 10 céntimos más que el año pasado.
La facturación de Siemens mejoró el año 2015/2016 a 79.645 millones de euros, 5,3% más.
«El último ejercicio fiscal fue uno de los más fuertes en la historia de nuestra casa. Sin considerar las ventas de participaciones, incluso, el mejor», dijo el presidente de Siemens, Joe Kaeser.
La entrada de pedidos también mejoró en el último ejercicio económico 5%, hasta 86.480 millones de euros, en comparación con el año anterior.
Sin considerar los efectos negativos de los tipos de cambio, el volumen de negocios y la entrada de pedidos hubieran subido 6% respectivamente.
Asimismo, Siemens y Bentley Systems han llegado a una alianza estratégica para impulsar la digitalización en áreas en las que se complementan.
De este modo, ambas compañías quieren concluir procesos de infraestructura con más rapidez y mejorar el resultado de las plantas.
Siemens y Bentley quieren invertir 50 millones de euros en el desarrollo de soluciones conjuntas para las áreas de infraestructura e industria.
El resultado de la división industrial de Siemens mejoró en el último ejercicio 13%, hasta 8.700 millones de euros.
Siemens destacó el crecimiento en las divisiones de electricidad y gas, gestión de energía y renovables.
La entrada de pedidos mejoró en la división de electricidad y gas en todo el ejercicio casi 24% (19.454 millones de euros), pero bajó en el cuarto trimestre 39% (3.218 millones).
Algo similar ocurrió en la división de renovables con un aumento del 30% en todo el año, pero con una caída del 56% en los últimos meses del ejercicio.
Estas y la división de tecnología sanitaria y de gestión de energía son las que más crecen y las que más ganan.
El beneficio operativo de electricidad y gas en todo el ejercicio fue de 1.583 millones de euros (25,2% más), el de renovables de 441 millones (más de tres veces más) y el de tecnología sanitaria de 2.128 millones (7% más).
La gestión de energía aportó un beneficio operativo de 857 millones de euros (55,1% más).
El beneficio neto de Siemens aumentó casi 20% en el cuarto trimestre fiscal, hasta 1.150 millones de euros.
Pero la entrada de nuevos pedidos se redujo los últimos meses del ejercicio 14%, a 20.330 millones, tras la caída de grandes pedidos en las divisiones de electricidad y gas y energía eólica.
Kaeser descarta que la elección de Donald Trump como nuevo presidente de EEUU vaya a afectar a las actividades de Siemens.
Se mantienen las buenas perspectivas para las divisiones de tecnología sanitaria y de renovables.
El presidente de Siemens dijo al presentar las cuentas que existen muchas incertidumbres por el crecimiento del populismo en diferentes partes del mundo y la inmigración.
Siemens pronostica un pequeño aumento de la facturación y el beneficio, así como un crecimiento de la entrada de pedidos en el año fiscal 2016/2017.