El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, instó este miércoles a mantener las sanciones impuestas por la comunidad internacional a Rusia, teniendo en cuenta la «significativa» responsabilidad que tiene en el conflicto separatista en el este de Ucrania.
«Llamo a todas las partes a redoblar sus esfuerzos por implementar loa acuerdos (de paz) de Minsk completamente. Como primer paso, necesitamos ver un alto el fuego completo e inmediato», indicó Stoltenberg en una rueda de prensa tras participar en una reunión de la Comisión OTAN-Ucrania a nivel de ministros de Exteriores.
«Entretanto, la comunidad internacional debe mantener la presión sobre Rusia para que respete sus obligaciones. En especial, mientras la situación de seguridad en el este de Ucrania siga tan grave, es importante que se mantengan las sanciones económicas», agregó.
Los ministros de Exteriores aliados se reunieron con su homólogo ucraniano, Pavel Klimkin, quien «reconfirmó el compromiso de Ucrania con los acuerdos de Minsk».
«Rusia tiene una responsabilidad significativa para llevar el conflicto a su término. La diplomacia ofrece la única solución viable a la crisis en Ucrania», destacó Stoltenberg.
En la reunión, la OTAN expresó su «apoyo inquebrantable» a Ucrania y reiteró que «no reconoce ni reconocerá la anexión ilegal» de la península ucraniana de Crimea por parte de Rusia.
Stoltenberg destacó que, el mes pasado, se produjo un «enorme incremento de las violaciones del alto el fuego», las cuales continúan, con cientos de explosiones causadas cada día «por equipos prohibidos por los acuerdos de Minsk».
El político noruego lamentó que no se haya retirado el armamento pesado de la línea de contacto, como piden los acuerdos de paz, y precisó que sólo 13% de esas armas registrado por la Organización para la Cooperación y la Seguridad en Europa (OSCE) puede actualmente ser rastreado.
«Militantes respaldados por Rusia siguen restringiendo la libre circulación de los observadores de la OSCE y algunos de ellos incluso han sido objetivo» de los ataques, comentó.
Klimkin informó a los aliados de los avances del país en sus reformas y Stoltenberg destacó que, «mientras Ucrania continúe por el camino de las reformas, los aliados seguirán proporcionándole fuerte apoyo práctico y político».
Por su parte, Klimkin indicó en otra rueda de prensa que, «tras la agresión de Rusia nuestra decisión política y moral es de no volver a cooperar con Rusia como lo hacíamos en el pasado».
También aseguró que «disponemos de suficientes capacidades en Ucrania para dar ayuda a OTAN a nivel de transporte aéreo estratégico».
«En el futuro, las capacidades ucranianas podrían ser esenciales para la Alianza. Todos los aliados quieren verdaderamente contemplar la posibilidad de utilizar este elemento de transporte aéreo estratégico», comentó el ministro, quien agregó que las fuerzas ucranianas son «plenamente capaces» de responder a la agresión rusa.
Sobre la discusión sobre las relaciones entre la OTAN y Rusia que los ministros aliados mantuvieron anoche durante una cena de trabajo al término de la primera jornada de su reunión en Bruselas, Stoltenberg dijo que mantendrán su «doble enfoque» de seguir reforzando la seguridad de la Alianza a la vez que tienen abiertos los canales de diálogo con Rusia para no aislar a ese país.
«No vemos ninguna amenaza inminente contra ningún aliado», concluyó.
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