El principal partido opositor de Sudáfrica, la Alianza Democrática (AD), presentó este martes una denuncia contra el presidente del país, Jacob Zuma, por supuestos delitos de corrupción.
La acusación está relacionada con un presunto trato de favor otorgado por Zuma a los Gupta, una familia de empresarios de origen indio con la que el hijo del presidente tiene negocios particulares.
Según testimonios recogidos en un informe de la exdefensora del Pueblo Thuli Madonsela publicado este mes, los tres hermanos Gupta llegaron a ofrecer, con el conocimiento de Zuma, puestos de ministro a dos miembros del partido gobernante, además de obtener irregularmente contratos públicos para sus empresas.
«Sostenemos que el informe ofrece pruebas fehacientes de la corrupción, la influencia indebida y las interferencias del presidente Zuma, miembros de la familia Gupta y otros actores, para satisfacer todos ellos su interés persona a expensas del pueblo de Sudáfrica», ha declarado el líder de la AD, Mmusi Maimane.
El informe presenta también cargos contra los Gupta, cuyo imperio empresarial tiene intereses en sectores tan diversos como la minería, los transportes, el armamento y la comunicación, y a los que la AD acusa de enriquecerse gracias a su estrecha relación con el presidente.
Los Gupta saltaron a la primera plana de los periódicos sudafricanos en abril de 2014, al conocerse que un avión privado que trasladaba desde India a invitados a una boda de la familia había aterrizado en una base militar de Pretoria de uso exclusivo de jefes de Estado.
Los pasajeros se saltaron los controles de pasaportes pertinentes y fueron escoltados por carretera por la Policía hasta el complejo de ocio de Sun City, a unos 180 kilómetros al noroeste de Johannesburgo, donde tuvo lugar la ceremonia.
Zuma negó cualquier conocimiento de lo ocurrido y el escándalo se saldó con el despido de varios funcionarios de rango menor.
En el poder desde 2009, Zuma finaliza en 2019 su segundo -y por imperativo legal- último mandato.
Sus años en el Gobierno se han caracterizado por las acusaciones de abuso de poder, el crecimiento del paro y el estancamiento económico, colocando a su partido, el oficialista Congreso Nacional Africano (CNA), en sus cotas más bajas de popularidad desde que llegara al poder en 1994.
Zuma ya tiene pendientes ante la Justicia otros 783 cargos de corrupción, relacionados con su participación a finales de los noventa en la compra de armamento por el Estado.
Descubre más desde ElClick Panama
Suscríbete y recibe las últimas entradas en tu correo electrónico.