La canciller alemana, Angela Merkel, logró un consenso calificado de «sensato» en el seno de su gran coalición de Gobierno para designar al ministro de Asuntos Exteriores, el socialdemócrata Frank-Walter Steinmeier, como presidente del país.
Tanto la Unión Cristianodemócrata (CDU) de Merkel como su hermanada Unión Socialcristiana de Baviera (CSU) respaldarán la candidatura del ministro como sucesor en el cargo del independiente Joachim Gauck, indicaron fuentes de los partidos, tras las consultas internas mantenidas este lunes por ambas formaciones.
Las filas conservadoras respaldarán así la propuesta surgida del Partido Socialdemócrata (SPD), cuyo líder, el vicecanciller y ministro de Economía Sigmar Gabriel, calificó a Steinmeier de «el mejor candidato posible» para el cargo.
Steinmeier es un político «experimentado» en política exterior y goza además de una gran aceptación entre el ciudadano, destacó este lunes Gabriel, en una declaración ante lo medios.
Junto a la gran coalición, han anunciado su intención de apoyarle los Verdes y los liberales, de modo que probablemente solo presenten una candidatura propia la Izquierda y, ocasionalmente, la derecha radical de Alternativa para Alemania (AfD).
El ministro se encuentra en Bruselas, como el resto de titulares de Exteriores de la Unión Europea (UE), por lo que hasta mañana no se espera en Berlín una declaración conjunta entre éste, Merkel, Gabriel y previsiblemente el líder de la CSU, Horst Seehofer.
La decisión a favor de Steinmeier sigue a la reunión mantenida el domingo entre los líderes de la gran coalición, que terminó sin declaraciones, pero con la convocatoria de consultas internas de las ejecutivas de la CDU y la CSU, por separado, este lunes.
Steinmeier ha sido ministro de Exteriores con Merkel tanto en esta legislatura (2013-2017) como en la primera de la conservadora (2005-2009) y fue candidato a la Cancillería del SPD (2009), aunque cosechó los peores resultados de la historia para su partido.
Gabriel, llevaba semanas promoviendo la candidatura de su correligionario Steinmeier pero los conservadores y, especialmente la CSU bávara, se resistían a apoyarlo alegando que ellos debían proponer al candidato por ser el grupo mayoritario en el Bundestag.
La elección del nuevo presidente tendrá lugar el próximo 12 de febrero, para lo que se convocará una sesión de la Asamblea Federal, cámara mixta compuesta por los diputados del Bundestag más el mismo número de representantes de los «Länder».
Gauck, de 76 años, anunció hace unos meses su intención de no presentarse a un segundo mandato por motivos de edad.
Conservadores y socialdemócratas se lanzaron entonces a la búsqueda de un candidato común tratando de zanjar esta decisión con el menor daño colateral posible, para evitar que el tema enturbie las elecciones generales, que se celebrarán en septiembre de 2017.
El cargo de presidente de Alemania representativo, pero su elección se considera una ocasión para medir las fuerzas entre los partidos ante la carrera para la Cancillería, ante la que ninguna formación de la gran coalición ha definido quién será su candidato.
Merkel, en el poder desde 2005, mantiene abierto si optará a la reelección para el que sería su cuarto mandato, lo que se atribuye a las tensiones entre las filas conservadores en torno a su liderazgo.
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