El primer ministro italiano, Matteo Renzi, tiene previsto acudir este lunes tras su derrota en el referéndum al palacio del Quirinale, sede de la presidencia de la República, para presentar su dimisión, al jefe de Estado, Sergio Mattarella, quien tendrá que decidir qué hacer ante un complejo panorama político.
El rechazo a la reforma constitucional propuesta por Renzi en el referéndum del domingo alcanzó el 59,11 % mientras que el «sí» quedó en el 40,89 %, por lo que el primer ministro anunció su decisión de dimitir como había prometido.
Como requiere la praxis, Renzi convocará un último consejo de ministros para «agradecer al Ejecutivo» su trabajo y evaluar los puntos urgentes que se deben afrontar, como la aprobación de los Presupuestos Generales, y después acudirá al Quirinale.
Renzi pone así fin a un Gobierno de 1.017 días y la palabra pasa ahora a Mattarella que deberá dar una solución a este nuevo periodo de inestabilidad.
Los posibles escenarios tras la dimisión son múltiples ya que antes de unas elecciones anticipadas será necesario aprobar, de aquí a finales del año, los Presupuestos Generales, pero además para casi todos los partidos es urgente cambiar la actual ley electoral.
Una ley electoral, el Italicum, aprobada por Renzi, pero que estaba pensada para aplicarla tras la reforma constitucional en la que sólo la Cámara de los diputados se elegía en las urnas.
Mattarella tendrá que aceptar la dimisión de Renzi y le pedirá que quedé en funciones hasta que se encuentre una solución y abrirá un turno de consultas con todos los representantes de los partidos políticos.
Las solución podría ser la de elegir un Gabinete técnico para reformar la ley electoral en espera de celebrar elecciones, pero también Mattarella podría elegir a otro exponente político y se habla del ministro de Cultura, Dario Franceschini, del de Infraestructura y Transportes, Graziano Delrio, o incluso el titular de Economía, Pier Carlo Padoan, que hoy no participará en la reunión de Eurogrupo en Bruselas.
A pesar de la dimisión de Renzi, este cuenta aún con la mayoría en el Parlamento por lo que será su grupo quien finalmente decidirá si apoya o no este nuevo Ejecutivo.
Algunos partidos como Forza Italia no han presionado para convocar elecciones anticipadas en breve, ya que tienen aún que reorganizarse y buscar un líder pues Silvio Berlusconi está inhabilitado por su condena.
Otros, como el Movimiento 5 Estrellas no quieren saber de nuevos Ejecutivos y han pedido que el Gobierno dimisionario y el actual Parlamento se ocupen de la reforma de la ley electoral y se vaya a votar en breve.
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