El presidente de Argentina, Mauricio Macri, presentó este lunes en Buenos Aires el proyecto de ley de Sistema Nacional de Desarrollo Cultural, que prevé la inversión privada para la realización de proyectos y actividades culturales sin fines de lucro que incentiven la diversidad de bienes y servicios culturales.
En un acto rodeado de diversas autoridades del Gobierno nacional y de las diferentes provincias, el mandatario remarcó la importancia de la cultura como «herramienta central» a la hora de unir a los argentinos y de lograr la «pobreza cero», que son dos de sus principales objetivos de Gobierno.
A su juicio, la pobreza no es sólo la carencia de una vivienda o un «buen trabajo», sino también la carencia de nutrirse culturalmente.
El proyecto de ley, que se enviará próximamente al Congreso para su discusión y eventual aprobación, busca inaugurar una vía directa y transparente de financiación de proyectos culturales de interés social a través de aportes de empresas privadas, que se desgravarían de sus respectivos aportes fiscales.
Se trata de una nueva iniciativa que buscará poner en contacto al Estado, que resignará recursos de su recaudación, a las empresas privadas, que apoyarán iniciativas culturales a través de sus impuestos, y a la sociedad civil, la cual de aprobarse el proyecto tendrá una forma alternativa de financiar proyectos culturales que no tengan fines comerciales.
Macri se mostró «feliz» de que esta iniciativa se ponga en marcha y esperó que el Congreso la plasme en una ley que en su opinión «estimula» a que trabajen juntos sector público, privado y tercer sector.
«La cultura genera miles y sorprendentes oportunidades», remarcó el jefe de Estado, para subrayar el «orgullo» de la cantidad de «faros argentinos» que hay en el mundo que abren oportunidades al país «que nadie se imagina como se ligan a partir de la cultura».
Macri puso como ejemplo al director de orquesta Daniel Barenboim, a la pianista Martha Argerich y al cineasta Juan José Campanella, aunque aseveró que podrían nombrarse «muchísimos más».
«También logra (la cultura) que tengamos otra paz interior, otros puentes de comunicación entre todos, que podamos realmente progresar desde ese lugar y potenciar otras actividades», indicó.
No obstante, el proyecto de ley presentado hoy pretende, según el Presidente, «una reparación histórica» respecto a la Argentina federal, en cuanto a respetar las diferencias de cada región y provincia y sus contenidos.
«Que cada comunidad pueda crecer y cada uno pueda elegir dónde vivir, qué hacer y a qué dedicarse y no que sigamos teniendo una Argentina donde la mayoría de las comunidades expulsa a la gente, especialmente a los jóvenes por falta de oportunidades», sentenció el mandatario.
«Cuando las tenemos ahí (las oportunidades), porque tenemos los talentos, los recursos, y lo podemos hacer. Y la cultura sin duda es algo que potencia todas esas capacidades que tenemos», concluyó.
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