La Organización Internacional de Policía Criminal (Interpol) clausuró este jueves en la isla indonesia de Bali su 85 asamblea general con la elección de un nuevo presidente y varias medidas que reforzarán la seguridad mundial.
«Afrontamos en la actualidad algunos de los más graves retos mundiales de la seguridad pública desde la Segunda Guerra Mundial», dijo el nuevo presidente de la Interpol, el chino Meng Hongwei, viceministro de Seguridad Pública, según una nota de prensa.
Meng indicó que en su mandato de cuatro años continuará el trabajo de promover la cooperación internacional policial, mientras se modernizan los mecanismos para responder a los retos actuales.
La asamblea general, que comenzó el lunes pasado, también aprobó el ingresó en el comité ejecutivo del comisario argentino Néstor Roncaglia, como delegado por América, del ruso Alexander Prokopchuk, como vicepresidente por Europa, y del húngaro Mátyás Hegyaljai, como delegado por Europa.
Entre las medidas consensuadas en estos cuatro días de sesiones destaca el llamamiento para compartir, en el ámbito mundial, datos biométricos de terroristas.
La Interpol dispone de información de cerca de 9.000 terroristas combatientes, pero solo el 10 por ciento contiene datos biométricos o fotos de gran resolución.
Esta información es insuficiente si se tiene en cuenta que, según calcula la Interpol, hay al menos 15.000 terroristas que combaten en zonas de conflicto y un número de ellos puede regresar a sus países para cometer atentados o dedicarse a otras tareas de proselitismo, reclutamiento o recaudación de fondos.
«Los gobiernos deberían examinar las razones por las que no quieren compartir sus datos biométricos de terroristas cuando está claro que si se hace se mejora enormemente la posibilidad de desbaratar potenciales ataques llevados a cabo por terroristas que han regresado a sus países», dijo el secretario general de la Interpol, Jürgen Stock, durante la sesión del miércoles.
Los datos biométricos incluyen ADN, huellas dactilares y otra información necesaria para contrarrestar las nuevas tácticas que emplean los terroristas para cruzar fronteras, como abundancia de alias, documentos falsos cada vez más complejos o la suplantación de las identidades de personas muertas en combate.
La asamblea general aprobó nuevas medidas para fortalecer la seguridad interna de la organización y el sistema por el que se comparte información.
Asimismo, se apoyó un acuerdo más ambicioso con el mayor operador mundial de cruceros, la empresa Carnival Corporation, para ampliar la seguridad en el transporte marítimo a través de controles más inteligentes.
Por último, la reunión encargó al diplomático y abogado sueco Hans Corell la revisión del procedimiento de incorporación a la entidad, por lo que paralizó por un año los trámites de ingreso de la Autoridad Nacional Palestina, Kosovo y las Islas Salomón.
La próxima asamblea general de la Interpol se celebrará en Pekín en 2017, donde Corell tendrá que presentar un informe, y en Kampala al año siguiente.
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