La Empresa Transmisión Eléctrica S.A. (ETESA) Y El Consejo Nacional del Agua (CONAGUA) informaron las perspectivas climáticas para el periodo de pronóstico, mayo a julio de 2019, que corresponde a los primeros meses de la temporada lluviosa.
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Expresó el gerente de aplicaciones climáticas de ETESA: «Durante el periodo de validez de esta perspectiva, hay un 75% de probabilidad que persista la fase de El Niño con intensidad débil, una probabilidad que disminuirá para el segundo semestre del año”.
Motivado al inicio de la temporada lluviosa la temperatura del aire disminuye. Las precipitaciones son de moderadas a fuertes, acompañadas de actividad eléctrica y vientos intensos.
En junio, se debilitará el flujo de los vientos alisios, condición que favorecerá la entrada de la brisa húmeda del Pacífico hasta la División Continental todos los días, y esto produce aguaceros con tormentas en horas de la tarde.
Para finales de este mes, se producirá un aumento en los vientos Alisios y las lluvias disminuirán, es un período seco dentro de la temporada lluviosa conocido como “el veranillo de San Juan”.
El mes de julio, normalmente se caracteriza por la marcada disminución de las lluvias luego de que se produce el primer máximo de precipitación durante el mes de junio.
Se espera una disminución entre el 10 y 20% en las precipitaciones comparado con los años anteriores en el pacífico central, oriente de Chiriquí, sur de la comarca Ngäbe-Buglé, centro y sur de Veraguas, Los Santos, Herrera y sur de Coclé.
En las áreas con mayor probabilidad de un escenario normal está la región Caribe occidental (Bocas del Toro, norte de Ngäbe-Buglé, norte de Veraguas, norte de Coclé, costa abajo de Colón) y tierras altas de Chiriquí con una probabilidad del 35% de que las lluvias se presenten ligeramente por arriba de lo normal.
Fuente: Panamá América