Después de que un adulto mayor cayera en el andén de la estación Cerro Viento, Línea 2 del Metro de Panamá, y lo rescataran usuarios, se encendieron las alarmas de qué se debería hacer en estos casos.
La gerente de Operaciones Liliana Aguirre, explicó el protocolo a seguir ante una emergencia. Aguirre lamenta el hecho y destacó la proactividad de los usuarios, sobre quienes recayó la responsabilidad de salvar al señor.
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Piensa que la ocasión es propicia para explicar a los usuarios los protocolos de seguridad que hay y reforzar la metrocultura que desde el día uno forma parte importante de los métodos de educación para saber conducirse en las Líneas 1 y 2.
Indicó que en todos los andenes de ambas líneas del Metro de Panamá hay dos botones, que en total son cuatro por estación y deberían usarse para el “frenado de urgencia”. Estos deben ser accionados por los usuarios, colaboradores o cualquier persona que esté cerca al momento en el que alguien cae a la vía.
Este botón, al accionarse, detiene los trenes, y permite lograr el tiempo necesario para activar el protocolo y rescatar a las personas.
Asegura Aguirre que cuando los usuarios ingresaron a la vía a rescatar al adulto, en el andén contrario había una persona de limpieza del Metro, la cual está debidamente capacitada para los protocolos de seguridad y accionó el botón.
Los usuarios en el andén de la incidencia accionaron dos botones más. Indicó que una vez que se recibe la notificación, las acciones se toman en sitio, pues existe un centro de control de operaciones que monitorea los trenes en tiempo real y mediante un circuito de vídeo vigilancia, las cámaras enfocan en el punto de la emergencia.
En tanto, los trenes también se pueden detener desde dicho centro. Dijo que después de un análisis de los vídeos, el tiempo que tomó entre la caída del usuario a zonas de vía, el rescate y que llegara el personal del Metro de Panamá con agentes de la Policía Nacional fue de tres minutos, debido a que uno de los colaboradores atendía a una persona no vidente llevándola a un acceso en la estación.
En cada estación existe una persona plenamente identificada y es responsable de las instalaciones y el público, además de unidades policiales que hacen rondas.
Mensualmente, se activan seis veces los botones de emergencia y solo el 90% corresponden a activaciones justificadas. El resto es por curiosidad del usuario, este último caso sería sancionado como falta grave, y la multa va desde 700 dólares en adelante.
Fuente: TVN Noticias
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