El lunes de Carnaval será cuando se levantará la prohibición de hacer campaña electoral. Esta fecha marcará el inicio de los 60 días de campaña antes de las elecciones generales.
Esta campaña electoral es sin dudas la que más ha tenido restricciones en los últimos 25 años. Hasta el momento, el TE maneja 562 expedientes por violación a la veda electoral a través de las redes sociales.
Luego de que se levanten las restricciones establecidas en el Código Electoral solo los partidos políticos y los candidatos podrán hacer campaña electoral. Ningún tercero puede pagar publicidad a los candidatos o a terceras personas.
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Algunas de las prohibiciones expresa que las personas naturales o jurídicas, a título propio o por cuenta propia de terceros, contraten o donen propaganda electoral a favor o en contra de partidos o políticos.
La propaganda electoral estará sujeta a las prohibiciones del uso no autorizado de los símbolos y de los candidatos y el uso no autorizado de la imagen personal, según el artículo 577 del Código de la Familia.
Las nóminas presidenciales solo pueden hacer propaganda electoral con el financiamiento público. Se impide la utilización del financiamiento privado para su propaganda electoral. Igual, los candidatos deben tener una cuenta bancaria para manejar ingresos y gastos y si el candidato excede el tope, significará causal de nulidad de la elección y de la proclamación.
Es de carácter obligatorio que los candidatos revelen la identidad de sus donantes y los montos de sus contribuciones, además de los gastos de campaña para dar más transparencia al proceso.
El tope de las donaciones privadas va a ser de $10 millones y cada donante solo puede aportar $300 mil. Los candidatos a diputados tienen un tope en las elecciones generales de $300 mil y por donante será de $75 mil. Para alcalde y representante de corregimiento, se debe multiplicar la suma de $5 por la cantidad de electores de la circunscripción, según el padrón electoral final.
Los candidatos se pueden financiar su campaña electoral con recursos donados o propios, para la movilización, combustible, hospedaje, activistas, brindis, caravanas y concentraciones, alquiler de locales, luz agua, teléfono, internet, celulares y propaganda electoral. Pero en cuenta al último aspecto, solo hasta el 30%.
El artículo 193 del Código Electoral establece que antes de las elecciones, el Estado debe contribuir con los gastos en que incurran los partidos a través del financiamiento público preelectoral así: 70% del cual será destinado exclusivamente a cubrir gastos de propaganda electoral y el 30% restante a contribuir con otros gastos de campaña.
El PRD va a recibir $12.3 millones; Cambio Democrático, $11.4 millones; Partido Panameñista, $9.6 millones; Molirena, $4.1 millones; Partido Popular, $3.5 millones.
A los recién conformados Partido Alianza y Frente Amplio por la Democracia, les va a corresponder $1.5 millones a cada uno.
Los partidos pueden destinar $30 millones a gastos de propaganda electoral, monto que va a representa el 70% de los $44 millones, según el Código Electoral
Fuente: La Estrella de Panamá
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