El expresidente del Gobierno italiano, Silvio Berlusconi, se sometió este miércoles a varios controles en un hospital de Milán (norte), el mismo en el que hace seis meses fue operado del corazón, después de una «agotadora» campaña electoral.
Berlusconi, que cumplió 80 años el pasado septiembre, acudió esta mañana al hospital milanés «San Raffaele» para pasar una serie de controles seis meses después de su intervención a corazón abierto, informaron los medios locales.
La diputada de la «berlusoconiana» «Forza Italia», Nunzia de Girolamo, explicó a SkyTg24 que se trata de «controles obligatorios después de una campaña electoral agotadora», en referencia a los actos previos al referéndum constitucional del pasado domingo.
La legisladora conservadora confirmó que Berlusconi «se encuentra bien».
Se trata de un control rutinario que ya se repitió el pasado 27 de noviembre, cuando se sometió a una revisión durante dos horas.
Berlusconi fue operado a corazón abierto el pasado 14 de junio, cuando se le sustituyó la válvula aórtica -que separa el corazón de la aorta y que se abre y cierra para permitir que la sangre fluya hacia el resto del cuerpo- por una biológica.
Tras esta delicada intervención, pasó dos días ingresado en la unidad de cuidados intensivos y recibió el alta médica el 5 de julio sucesivo, asegurando a su salida que esta había sido «una prueba muy dolorosa».
Después de su salida del hospital pasó varias semanas recuperándose, pero en ese tiempo ha tenido que hacer frente a temas tan importantes para su familia como la venta del club de fútbol A.C Milan o la búsqueda de un nuevo líder para la derecha italiana.
El pasado 30 de septiembre tuvo que ser nuevamente hospitalizado en una clínica de Nueva York después de notificar un malestar en la fase de aterrizaje en la ciudad estadounidense.
Berlusconi se ha mostrado muy activo durante la campaña previa al referéndum convocado por el primer ministro dimisionario Matteo Renzi sobre su reforma de la Constitución, una ley a la que el magnate se ha opuesto por considerarla antidemocrática.
En el actual escenario político italiano, en el que se prevén nuevas elecciones en los próximos meses tras la dimisión de Renzi, Berlusconi tratará de llegar a un acuerdo con los distintos partidos conservadores del país para concurrir en forma de coalición.
Todo para hacer frente al Partido Demócrata de Renzi, la principal formación de centroizquierda del país, y a los populistas del Movimiento Cinco Estrellas, las dos opciones mayoritarias según los sondeos.
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