El diario Crítica de Panamá expone una hipótesis particular sobre la muerte de la turista estadounidense Catherine Johannet, ocurrida en una zona boscosa de islas Bastimentos el pasado fin de semana.
Mediante información obtenida a través de fuentes confidenciales, afirmaron que el FBI cree que un asesino en serie podría estar detrás de este crimen y el de las holandesas Lisanne Froon y Kris Kremers, declaradas como desaparecidas el 1 de abril de 2014 en el sendero El Pianista, entre Chiriquí y Bocas del Toro.
La muerte de la turista estadounidense ocurrió por asfixia. El informe del Instituto de Medicina Legal y Ciencias Forenses (IMELCF) confirma que fue además golpeada y arrastrada.
Informes indicarían que los investigadores poseen pistas sobre la existencia de un asesino en serie que actúa cada cierto tiempo, sobre todo en la época seca o verano, en la zona occidental de Panamá.
El FBI sospecha que esta misma persona pudo haber asesinado a las holandesas Lisanne Froon y Kris Kremers, declaradas como desaparecidas el 1 de abril de 2014 en el sendero El Pianista, entre Chiriquí y Bocas del Toro.
Ese caso quedó sin ser esclarecido. Las autoridades tampoco afirmaron ni negaron que existió mano criminal y la familia, en medio de su dolor, dejó de insistir en Panamá.
Pero luego, las autoridades judiciales de Holanda revisaron los archivos de un celular de una de las chicas y se percataron de que habían llamado a los teléfonos de emergencia 911 de Panamá y al 112 de Holanda.
El abogado de los familiares de las holandesas, Enrique Arrocha, comentó en aquella ocasión que ellas hicieron llamadas los días 4 y 5 de abril de 2014 y que este se descargó. 5 días después, se registró otra llamada a ambas líneas de emergencia.
«¿Cómo pudieron cargar las baterías del celular en medio de la selva?», se preguntaba Arrocha aquella vez.
Redacción: Rossel Yakary Prado
Fuente: Crítica.com.pa
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