El grupo terrorista Estado Islámico (EI) trató de reventar este martes las celebraciones del ramadán con un doble atentado en Bagdad, con al menos 22 muertos y un centenar de heridos, mientras los yihadistas están cada vez más arrinconados en su antiguo feudo iraquí de Mosul.
El sangriento hecho fue perpetrado por suicidas que conducían coches bombas y, en ambos casos, tuvieron lugar en zonas de mayoría chií en el centro de la capital iraquí.
Al menos once personas y otras 75 resultaron heridas en la popular heladería Al Faqma, que estaba abarrotada por familias que habían acudido a comer de noche, como es costumbre durante el ramadán después de guardar el ayuno en las horas diurnas.
Entre las víctimas se encuentran niños y mujeres, aunque no precisaron su número, informaron fuentes policiales.
Una cámara de seguridad logró capturar imágenes que fueron difundidas por medios locales, en el instante de la gran explosión que afectó tanto al local como a la calle, por donde pasaban varios vehículos.
Con información de Unión Radio
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